domingo, 15 de junio de 2014

El empleo real es el mismo que hace un año: cero.




De cuando en cuando surgen nuevas estadísticas que sitúan la tasa de desempleo en un nivel más bajo. El problema de esto es que las estadísticas no contemplan los casos particulares, bajo qué condiciones. Son sólo números. Lo que proliferan son los “contratos basura”, amén de los contratos de “falso autónomo”, algo en lo que mucha gente cae desde la propia desesperación después de meses o años buscando trabajo. Los números pueden cambiar, pero la estabilidad y la creación de empleo real es la misma que hace un año: cero. Así, las estadísticas miopes dejan de contemplar al desempleado

Por qué no incluir también en el cálculo una estimación del fraude fiscal.

Los actuales dirigentes de la Unión Europea han importado una novedosa aplicación para mejorar, aún más si cabe, la contabilidad creativa. Después de ver que la economía de la mayor parte de los países miembros no levanta cabeza, han tomado la decisión de que el contrabando, las drogas y la prostitución formen parte del sacrosanto Producto Interior Bruto. Si no crece por las buenas, que lo haga por las malas, han debido decirse tras mucho discurrir.

Y, en efecto, a las malas (en cuanto a actividades ilegales) han acudido para inflar el PIB. Sería lógico introducir la nueva directriz en aquellos países que tengan legalizadas estas ocupaciones, pero en los que no, podíamos preguntarnos por qué no incluir también en el cálculo una estimación del fraude fiscal o del trapicheo, actividades generadoras de riqueza tan ilegales como las otras


Propongo la creación de una Consejería de Sentido Común que regule estos temas de andar por casa; Sea los aforados, o la corrupción.

Podria ser terrorismo de estado??

Da la impresión que los actuales responsables del Ministerio del Interior actúan de forma manifiestamente mejorable. Las últimas declaraciones del director general de la Policía son un cúmulo de despropósitos.

Es axiomático que el terrorismo busca, como objetivo primario, aterrorizar. Las noticias de sus atentados son su alimento. Es evidente que esas noticias no se pueden esconder y que los medios informan, como no puede ser de otra manera, de los atentados. Lo que es sorprendente es que el máximo responsable de la Policía realice una publicidad gratuita de grupos, apuntando que “hay la posibilidad cierta de que cometan atentados”. Esto, aparte de no servir operativamente para nada, solo proporciona una inyección de moral para los “teóricos” miembros de los “teóricos” grupos, que en buena lógica pueden pensar que si sin hacer nada hablan de ellos, cuando hagan algo serán noticia de portada, que es el objetivo.

Parece más racional investigar, perseguir y, si procede, detener a los aspirantes a terroristas y dar información sobre ellos cuando se hayan concretado las actuaciones, desarticulados o detenidos y puestos a disposición judicial. Actuar con discreción evitaría inquietudes a los ciudadanos, que bastantes problemas tienen sin que venga alguien a contarles que viene el lobo.


Incluir la prostitución en el PIB es legalizarla de-facto. sera que el desgobierno tiene ansias de proxeneta.

Incluir además de la prost. las cagadas del gobierno y ya tenemos 25% de PIB mas.
Si ademas incluimos lo que cagan los aforados, somos ricos.

Decrecimiento
¿Alguien se ha preguntado qué ocurriría si hiciéramos reiteradas huelgas de consumo? Me refiero, obviamente, a prescindir conscientemente de comprar o adquirir bienes y servicios absolutamente superfluos y, por tanto, prescindibles. Se prima la cantidad inundatoria, no la calidad de lo que compramos. E incluso se nos seduce y convence con sofisticadas triquiñuelas y envolventes tácticas de marketing para que compremos, aunque sea a plazos y endeudándonos de por vida. Esta enervante carrera hacia la nada por las autopistas de la obsolescencia programada, endeudan a los individuos, a las familias y a los Estados. Hemos pasado del “Estado de bienestar intuido” al “Estado del derroche manirroto”; de la alpargata y de la albarca al smarphone y a la tableta. La tecnología es maravillosa, pero en manos de ciudadanos formados y críticos no fácilmente manipulables. Somos ahora ya deudores hipotecados de nuestra fragilidad, estupidez e inconsistencia.